No tengo muchas fotos de mi visita porque no me llevé la cámara a Sierra Nevada para hacer snow (se sobreentienden los peligros de una caída), ni tampoco de la ciudad en sí porque esta mañana mientras callejeábamos estuvo nevando -qué bella y qué fría la nieve.
El caso es que, aunque el cielo estaba totalmente cubierto, siempre había imaginado Granada mucho más oscura, quizás porque la mayoría de relatos que guardo son de amigos que cuentan sus noches y no sus días. Y al llegar me pareció luminosa y solemne, y el barrio del Albayzín como tallado en la propia loma de la montaña, sencillo y agradable.
Como digo, la nieve empezó a caer y guardé la cámara, así que fotos físicas tengo pocas -en mi memoria muchas otras, pero esas son más difíciles de difundir. Comparto con vosotros algunos detallitos
