sábado, 13 de julio de 2013

El peso del ego

Creo que la mayoría de las penas modernas provienen de ese mal bicho antaño inventado y de compulsiva manera sobrealimentado por los distintos discursos de la sociedad: nuestro coleguita, el señor ego. El verse en situaciones comprometidas y dejar de hacer lo que de verdad querríamos hacer por motivos como el orgullo, ridículo o discreción apela todo hacia una imagen impuesta por el exterior con demasiadas exigencias y expectativas.

Joder, basta de tanta teoría, Alicia. Simplemente una nota para recordar: mejor ser ridículo, obviar la necesidad del ojo por ojo, y actuar conforme lo que realmente te dictamina no la cabeza, no el corazón, sino algo más ancestral, más inherente a tu ser: trust your guts, kiddo -and stop worrying so much about keeping your cheen up, for God's sake!

Po ea, a dormir
Y es en ese momento
justo cuando parece recuperarse el ciclo del tiempo
se me cruza tu imagen
y esa necesidad de enterrarme dentro de tu pecho

miércoles, 3 de julio de 2013

No sé, no sé

No me acuerdo, ¿qué es este idioma extraño?
Bueno, bueno, no resulta tanto extraño como ajeno.
¿En qué rincón lejano se estará escuchando?
Porque aquí no invade las calles ni los cuerpos,
aquí no hay cabida para voces latinas.
Es el mundo eslavo, ese sí que es un mundo raro
Y el colmo, que ahora resulte más cercano.

Or something something

Peso y vuelo

Me pesan lo párpados,
pesan los extremos del cuerpo,
me pesa, me pesa, me pesa el alma

Cada paso,
el esfuerzo de mover el mundo,
de continuar el movimiento

[Typing, me pesan los dedos]

Tanto me pesa el sueño
que hoy me siento vencida,
me dejo llevar por las arenas de Morfeo

Y entonces despierto

El aire es más ligero,
el cuerpo ahora es pluma,
el mundo liviano cielo

Salto,
no es necesario demasiado alto,
y ya emprendo el vuelo

Volar como etéreo polen,
tras la gravedad de piedra en el suelo