lunes, 16 de enero de 2012

Renacimiento

Puedo parecer serena

Soy una sonrisa
vital, calma y sencilla

Pero por dentro
mil incendios nacen
y mil ríos se agitan

Por dentro esta luz
que todo lo invade
que todo examina

Si tan solo existiera el interruptor
Para en un segundo desconectar
este filtro del alma
Para volver a encontrar
el animal más fiero,
la esencia más pura,
la vida primera
sin valla ninguna

Si tan solo yo pudiera
agarrar ese trozo de luz
lleguemos a un entendimiento, decirle
y dar rienda suelta al espíritu,
que domine la mente intervenida,
obviando los civilizados conceptos,
volver a la primigenia era

Entonces las mareas se calmarían
Entonces cenizas serían los fuegos
El viento recorrería este páramo incierto
en el que nuevos focos nacerían

Despierten, entonces diría
y como si de plantas se tratasen
esperaría que floreciesen,
las chispas del nuevo incendio
los manantiales del nuevo torrente
los fulgores del nuevo mundo

¡Qué de luz en él habría!

1 comentario:

Sándal.o. dijo...

- Por qué, con tus encantamientos infernales, me has arrancado a la tranquilidad de mi primera vida... El sol y la luna brillaban para mí sin artificio; me despertaba entre apacibles pensamientos, y al amanecer plegaba mis hojas para hacer mis oraciones. No veía nada de malo, pues no tenía ojos; no escuchaba nada de malo, pues no tenía oídos; ¡pero me vengaré!
Discurso de la mandrágora, en Isabel de Egipto - de ACHIM VON ARNIM (Fragmento de Rayuela ~ Julio Cortázar) <--- Hazme el favó y leetelo!!