sábado, 11 de octubre de 2008

Los girasoles ciego, Méndez

El fragmento es de Los girasoles ciegos, de Alberto Méndez, más concretamente de 'Tercera derrota: 1941 o El idioma de los muertos'

Apenas pudo apartarse recuperó el lápiz y el papel y continuó escribiendo:

"... Sigo vivo. El lenguaje de mis sueños es cada vez más asequible. Hablo de amortesía cuando quiero demostrar afecto y suavumbre es la rara cualidad de los que me hablan con ternura. Colinura, deperpecho, soñaltivo, alticovar son palabras que utilizan las gentes de mis sueños para hablarme de paisajes añorados y de lugares que están más allá de las barreras. Llaman quezbel a todo lo que tañe y lobisidio al ulular del viento. Dicen fragonantía para hablar del ruido del agua en los arroyos. Me gusta hablar en ese idioma ''


El muchacho de las liendres se sentó a su lado y guardó silencio. Juan interrumpió su carta y supo que había aprendido a catalogar las tristezas, a distinguir una desesperación de otra, a reconocer el miedo con odio, el odio a secas y el miedo químicamente puro. Sabía incluso diferenciar al que se arrepiente por no haber hecho algo del que se arrepiente por haberlo hehco. Pero aquel muchacho tenía en la mirada la cicatriz de un sentimiento que ya casi había olvidado: la añoranza. Probablemente por esa razón hablaron despaciosamente mirando el cielo cuarteado a través de una ventana enrejada. Juan le habló de Ramón y Cajal -un luchador solitario- y de cómo se formaban las nubes. Le habló de Darwin y de la importancia del dedo pulgar para que el hombre se hubiera hecho hombre, bajara del árbol y aprendiera a matar a sus iguales.

1 comentario:

Anónimo dijo...

¿ EL TEMA DE ESTE TEXTO CUAL SERIA?