viernes, 28 de marzo de 2008

¿Qué es el sexo?

Por Julia


- ¿Qué es el sexo?
- ¿El sexo? Es como una banana.
- ¿Qué gusto tiene?
- Más o menos salado.
- No son saladas las bananas.
- Ah, ¡pero no es una fruta el sexo!
- ¿Qué es, entonces?
- Sirve para hacer a los nenes.
- ¿Los nenes son puré de banana?
- ¡No dije eso! Hay un agujero chiquito en la punta de la banana, y es por ahí que salen los nenes.
- ¡Son muy chiquitos entonces!
- Oh, sí, ¿como no?
- Y yo, ¿porqué no tengo una banana?
- Las nenas no tienen banana. Hay que nacer con una.
- Puedo colgarme una.
- A ver, Liliana, ¡no vas a colgarte una banana! ¡Esas son cosas de lesbiana!
- Pero entonces, si no soy una lesbiana, ¿porqué será que no tengo una banana?
- ¡Qué hinchapelotas! ¿Es que yo tengo una banana?
- Mostrame.
- ¿Querés echar un vistazo?
- ¡Tenés una banana!
- No, ¡no tengo!
- Entonces, mostrame.
- ("¿Después de todo, porqué no? Si los muestran de una forma peor en la escuela..." Se levanta la pollera) Mirá.
- Tenés un agujero grande vos.
- ¡A la fuerza es grande! Es de ahí por donde saliste.
- ¿Por ahi? ¡Me habías dicho que había salido de una banana!
- ¡Habías salido al principio de una banana!
- ¿Y vos pensas que yo me voy a creer eso? ¡Antes me habías dicho que había nacido de un repollo!
- Pero eso es lo que se les cuenta a los chicos chiquitos.
- ¿Porqué es que se les cuenta eso a los chicos chiquitos?
- No sé. Es más poético.
- ¿Porqué el repollo es más poético que la banana?
- ¿Porque no preguntás todo esto en la escuela? Estoy segura de que en tu escuela dan una clase de poesia. ¡No soy "La Fontaine"!
- ¡A mí no me importa la poesia! ¡Yo quiero tener una banana!
- ("Qué vida, señor...") Escucha Liliana, hay que ser paciente. ¡Cuando seas grande vas a tener la de tu marido!
- ¿Porqué él me daría su banana?
- ¡No te la va a dar!
- ¿Me la va a prestar nomás?
- Justamente, te la va a prestar. Y ahora andá a jugar.

(La nena sale y vuelve a entrar.)
- ¿Voy a poder jugar con su banana?
- ¡Ciertamente no! ¿Vas a parar de hablar de bananas? ¿No te enseñan a ser educada en la escuela? ¿Vas a parar de decir chanchadas? ¡Te voy a mandar con la monjas junto con tu prima Fernanda! ("¡la pequeña peste!")

La nena sale y se encuentra con un grupo de amigas que la esperan afuera.
- Amigas: ¿Y? ¿Qué te dijo?
- Nena: Nada.
- Amigas: ¿Nada de nada?
- Nena: Oh, sí... Me dijo que los repollos son poéticos y que las bananas son chanchas.


Seguramente ya lo sabíais

1 comentario:

Anónimo dijo...

Los repollos son poéticos... (L)